Técnicas quirúrgicas que empleamos:
Vertebroplastia
La vertebroplastia es un procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo para el tratamiento de las fracturas vertebrales.
Cuando una vértebra se fractura causa dolor. Estas fracturas por compresión pueden incluir el colapso de una o más vértebras. En la vertebroplastia se inserta una aguja en la vértebra fracturada, posteriormente se rellenará el cuerpo vertebral con un tipo de cemento específico. El cemento contiene un ingrediente llamado poli metil metacrilato (PMMA) que se solidifica una vez inyectado y permanece siempre en la vértebra, ya que no se reabsorbe. El PMMA tiene una flexibilidad y fortaleza óptimas.
Es un procedimiento seguro y eficaz
Este procedimiento normalmente tiene éxito en aliviar el dolor causado por una fractura por compresión vertebral. Muchos pacientes sienten alivio casi inmediatamente. La vertebroplastia puede permitir al paciente volver a su nivel anterior de actividad sin necesidad de terapia física o rehabilitación.
Cifoplastia
La cifoplastia con balón es una opción de tratamiento mínimamente invasiva para los pacientes con fracturas vertebrales por compresión.
En este procedimiento se usan balones ortopédicos para reparar una fractura vertebral. Después se utiliza cemento óseo para crear un molde interno y estabilizar la fractura.
Los problemas que se pueden tratar mediante cifoplastia con balón son: la cifosis, la osteoporosis y las fracturas vertebrales.
Recuperación de la cifoplastia
El alivio del dolor va a ser inmediato en algunos pacientes.
En otros, la eliminación o la reducción del dolor puede ocurrir dentro de los dos días posteriores. Una vez en su hogar, los pacientes pueden retomar sus actividades cotidianas normales, a pesar de que los esfuerzos extenuantes, como levantar cosas pesadas, debe evitarse por al menos seis semanas.
Candidatos a la cifoplastia
La cifoplastia no puede corregir una deformidad establecida de la columna y es por ello que ciertos pacientes con osteoporosis no son candidatos para este tratamiento. Los pacientes que experimentan síntomas de dolor o deformidades vertebrales de fracturas osteoporóticas recientes por compresión son posibles candidatos a la cifoplastía. El procedimiento debería completarse dentro de las 8 semanas de ocurrida la fractura para la probabilidad más alta de restauración de la altura.
Nucleoplastia
(o nucleolisis) lumbar y cervical
La nucleoplastía, o coblación por radiofrecuencia, es un procedimiento de descompresión discal. Se presenta como una alternativa a las intervenciones quirúrgicas clásicas para tratar los casos más serios de dolor provocado por una hernia discal.
Es un procedimiento que combina la tecnología de la radiofrecuencia con las técnicas de cirugía mínimamente invasivas.
La nucleoplastia consiste
en la aplicación de una corriente eléctrica de bajo voltaje y alta frecuencia (radiofrecuencia) en el disco vertebral herniado, con el objetivo de descomprimir los nervios afectados por la hernia.
El especialista introduce unas agujas especiales, por cuyo interior pasa el electrodo, hasta llegar al interior del disco a tratar, aplica la corriente, verifica los resultados y retira la aguja.
La lógica es la siguiente: La corriente genera el calor suficiente para quemar (termocoagular) las proteínas discales y evaporar el agua contenida en el disco, sin producir daños en los tejidos adyacentes.
Al cauterizar partes internas del disco, éste pierde volumen (por tanto la hernia también). Al reducirse el tamaño de la hernia, se reduce la presión que ésta aplica sobre el nervio comprimido, lo que reduce o elimina el dolor.